¡Jugadores del mundo, hoy estamos de celebración! Nintendo Switch y Zelda ya están entre nosotros. Hoy es un gran día para los que amamos este hobby, para la industria y, sobre todo, para los fans. Es un día donde recuperamos un pedacito de aquella ilusión que sentíamos cuando éramos niños.
Nintendo sigue haciéndonos soñar. Hoy, ninguna crítica amparada en gráficos, potencia o cualquier otro término relacionado ensuciará la ilusión de millones de personas que ahora mismo estarán con la Switch encendida recorriendo las praderas de Hyrule. Hoy volvemos a sentirnos niños de nuevo.
Nintendo sigue en su eterna búsqueda de la magia a través de sus franquicias, nuevos títulos y formas de jugar. Quizá todo esto provoca que sus lanzamientos sean irrepetibles. Nintendo sigue, en definitiva, perpetuando su historia, nuestra historia.
Hoy es un día donde se comparte felicidad. Las otras compañías felicitan a Nintendo por su lanzamiento; unos jugadores se alegran por los otros. Las redes se inundan de fotos de gente entusiasmada.
Estas semanas he observado esa ilusión en Museboy. Iba comentado los días que faltaban para el lanzamiento. Algunos días me llegaba el audio del último tráiler. «Otra vez lo está viendo», pensaba mientras me alegraba por él. «Voy a estar a tope con Zelda», me repetía. No le culpo, yo desapareceré del mapa con Mass Effect Andromeda. Acaba de volver de la oficina de mensajería con la Switch y una sonrisa en su cara. Prepara un buen sitio para ella mientras tararea la melodía del tráiler. Ahora, enciende la Switch para vivir su propia leyenda.
Tengáis la Switch o no, disfrutad de este maravilloso día.
