No es la primera vez que encontramos el hecho de resucitar antiguas sagas, o juegos clásicos, muchas veces con más ganas de aprovecharse de la nostalgia de la gente que de conseguir un juego entretenido y aceptable. Esta vez tenemos a Wolfenstein resurgiendo, con Wolfenstein The New Order una propuesta disfrazada del clásico FPS «a la antigua» con nuevas ideas y actualizada a los nuevos tiempos, y os aseguro que después de jugar a tantos juegos bélicos con campañas de 4 horas en las que la única motivación es terminarla para ponerse con el multijugador, suena realmente refrescante.
Precisamente para comenzar a hablar de Wolfenstein The New Order hay que decir dos cosas, que se centra en el modo campaña, cosa que imploran muchos aficionados al género desde hace años. Parece que solo se puedan hacer FPS encarados al modo multijugador, y aunque sean del agrado de muchos más jugadores, los más veteranos estaban hartos de la dejadez de las campañas en los FPS actuales. Por otro lado, Wolfenstein The New Order ha sido desarrollado bajo el motor ID Tech 5 y el cobijo de ID Software por MachinaGames, formada por artífices de grandes aventuras en primera persona como el sorprendente Riddick y la saga The Darkness. Juntando esos ingredientes, no puede salir nada malo.
Historia
La historia recobra las viejas costumbres de usar a los nazis como enemigo número uno, como es la norma en la saga Wolfenstein (Ya estábamos hartos de rusos y asiáticos). Esta vez, EEUU perderá ante ellos por el uso de una misteriosa y avanzad tecnología, nuestro protagonista quedará gravemente herido en esa guerra, y tras 16 años, despierta de su letargo para ponerse manos a la obra junto a compañeros de la resistencia y limpiar unos años 60 con todo el planeta gobernado por los nazis.
Jugabilidad
He notado que mucha gente ha asociado directamente la jugabilidad de este Wolfenstein a los FPS clásicos, yo el primero recién comenzada la aventura, pero nada más allá de la realidad, el juego mezcla muchas propuestas interesantes bajo esa antigua idea de crear un FPS para jugar en solitario. Para empezar, los tiroteos van acompañados también de sigilo, dándonos siempre a escoger sin forzar siempre el hecho de que matemos a alguien por la espalda o no. Cuantas veces hemos visto el típico enemigo al principio del juego que está de espaldas para matarlo sigilosamente y ya a lo largo del juego pocas oportunidades más nos dan de hacerlo.
En Wolfenstein The New Order nos permitirán, de forma natural y si somos suficientemente habilidosos, el poder eliminar a todos los enemigos de una zona a cuchillo y de forma sigilosa, sin necesidad de liarla demasiado, pero amigos míos, si estáis sedientos de ello, también cabe la opción de usar tu arma y disparar a todo lo que se mueve hasta despejar la zona, como es mas habitual en este tipo de juegos.
Aunque muchos de vosotros podéis estar pensando que Wolfenstein The New Order es el «Duke Nukem Forever» de Wolfenstein, por suerte os puedo decir que no es así. Como os digo, aunque es una historia con el típico héroe americano, en Wolfenstein no parodian tanto ese hecho y lo mantienen a un nivel más serio, con ningún momento cómico dentro de su narrativa.
Los capítulos del juego están muy bien hilados, espaciando bien los momentos para disparar, para explorar en busca de algún objeto, a la hora de usar algún vehículo (Coche, Mecha, Submarino…) e incluso para las escenas cinematográficas que nos encadenarán las diferentes etapas de la aventura. Todo está concebido para divertirse y engancharse de una forma directa, sin alardes ni historias demasiado pretenciosas.
Otra cosa que ha retomado este nuevo Wolfenstein de los más antiguos FPS son la vuelta de la «Salud» y «Escudo», aunque la primera goza de la regeneración automática, además de encontrar botiquines para hacerlo más rápido todavía. Los que no hacen aparición esta vez son los QTE (Quick Time Events) por lo que si hacemos alguna acción con una animación larga, la haremos con un solo botón y no con una combinación tediosa que tan de moda se han puesto en los últimos años.
Los escenarios se muestran de una forma mas o menos lineal, un poco a la antigua usanza, ciertas zonas algo más abiertas donde podremos recorrer el escenario por varios sitios, y otros, los interiores, que solamente tendremos un camino por el que avanzar, aunque en el contexto se entiende que no es fácil que haya más de un camino siempre. En todo caso, nos invitarán a explorar cada rincón para encontrar ciertos objetos coleccionables y, como en muchos otros juegos, audios y fragmentos de texto que nos ayudarán a entender mejor la situación histórica en la que da lugar el juego.
En cuanto a los enemigos no solamente serán los nazis gritones de toda la vida, también tendremos perros robóticos (que no nos matarán de un salto si no hacemos «click» en el momento justo, tranquilos), mechas, robots gigantescos… e incluso algunos de ellos serán unos supervitaminados jefes finales, a la antigua usanza, que nos harán sudar algo más de lo habitual.
Por suerte, para acabar con esos «Bosses», tendremos armas lo suficientemente destructivas, y aunque no hay una gran variedad, si podemos tomar un arma a cada mano y sentirnos los reyes de la pista. La munición en ciertos momentos puede llegar a escasear, aunque con un poco de exploración encontrarás casi siempre solución, pues los escenarios están sobrepoblados de botiquines, escudo y munición, además de la que sueltan los enemigos.
Me ha sorprendido gratamente el uso de algunas herramientas que no son solamente para disparar, si no que sirven para ir abriéndonos paso a través de verjas y puertas encadenadas. Por esto y otros detalles, el juego me recordaba mucho más a Half Life que al típico FPS de disparar a todo lo que se mueve, cosa que se agradece y logra equilibrar los capítulos del juego sin hacerse repetitivo.
Apartado técnico
El motor ID Tech 5 de ID Software utilizado en «Rage» sigue enseñando sus pros y contras en Wolfenstein The New Order. Aunque la optimización no es del todo mala, si no puedes jugar en Ultra, vas a tener algunos problemillas gráficos heredados de este motor gráfico, tales como está pasando en consolas, con las llamadas «hipertexturas» que tardan en cargar afeando cada giro brusco que hagamos. Aun así, como os comento, esto sucede más en la versión de consolas (seguramente por sus límites con la memoria RAM), en PC potente no deberías tener problemas de este tipo.
En todo caso, y dejando a un lado eso, la solidez del juego es digna de admirar, con un nivel de detalle y partículas que raya a gran altura, una ambientación impecable en cada zona que recorremos (Alcantarillas, castillos, campos de concentración…). También me ha llamado la atención el hecho de que los enemigos no desaparezcan jamás (A no ser que los hagamos volar en pedazos de un potente disparo, claro).
El juego también goza de un buen nivel de «destructibilidad» bastante interesante, pudiendo acabar con los parapetos de los enemigos en muchas de las ocasiones a base de balas o granadas.
El apartado sonoro también está bien trabajado. Los efectos de sonido suenan bien y no nublan el resto de apartados. Destaca su doblaje al español, aunque la sincronización labial tiene algunos fallos perdonables.
Conclusión
Wolfenstein The New Order nos trae una buena aventura en primera persona, mucho más equilibrada y capacitada para divertir en todos sus ámbitos y en mi opinión muy superior a recientes «FPS» como la saga Bioshock, que vuelcan al jugador en su historia y olvidan otros conceptos más importantes en un videojuego.
Si estás harto de los últimos FPS con campañas de 5 horas en las que te pasas más tiempo viendo videos que jugando, este es tu juego.
