El 27 de noviembre de 1998, Sega lanzó en Japón lo que iba a ser una consola revolucionaria con conexión a internet, la Dreamcast. Desgraciadamente, como todos ya sabéis, la consola murió de forma prematura por diferentes motivos. Para empezar, Sega nunca se recuperó económicamente del fracaso que supuso Sega Saturn, y la compañía sufría graves problemas económicos e internos desde entonces. Además, ese mismo año se anunció Playstation 2, una consola con mejoras arrolladoras y respaldada por las millonarias ventas de su predecesora. La consola de Sony apareció un año más tarde, cortando la buena racha por la que pasaba Dreamcast. Por si esto fuera poco, algunas compañías de renombre no prestaron apoyo a la consola de Sega, y poco más tarde llegó la piratería. Todo esto unido hizo que Sega se despidiera definitivamente del mundo de las consolas. ¡Pero no hablemos de cosas tristes! Queremos rememorar todo lo bueno que nos dejó la última consola de Sega, la gran Dreamcast.
Si Dreamcast fue la última consola de Sega, también se podría decir que fue la última para mi hermano y para mí durante un largo tiempo. Su marcha fue un duro golpe para nosotros, ya que soñábamos con tener la consola meses antes de su lanzamiento, ilusionados por la cantidad de características únicas que leíamos en las revistas, especialmente nos flipaba lo de la conexión a internet (aunque luego no resultó muy factible) y los juegos en producción. El anuncio de su cese de fabricación fue como un jarro de agua fría, y en el tintero se quedaron muchos juegos, algunos de los cuales eran soñadas secuelas. Leer después que Sega se retiraba del mundo de las consolas y pasaría a desarrollar y distribuir exclusivamente software, lo vivimos a nivel personal como si un trocito de nuestra infancia y adolescencia se rompiera en mil pedazos. A partir de ahí comenzó una etapa pecera muy larga, donde desconecté completamente de todo aquello que no saliera para mi ordena. Dreamcast tuvo un catálogo envidiable, por lo que os preguntamos por Twitter cuáles son vuestros juegos favoritos. Estas fueron las respuestas:
La precipitada necesidad de innovar y ser la primera acabaron con la andadura de Sega en el mercado consolero. Aún así, a día de hoy, mucha gente no olvida lo que Sega ha hecho por los videojuegos todos estos años, y es sorprendente cómo jóvenes, avivados por los recuerdos de veteranos, se lanzan a descubrir viejas consolas y joyas que nos resistimos a olvidar.
Vaya recuerdos con ella! Gracias a Dreamcast pude jugar a juegazos como Sonic Adventure, Shenmue o Re Code Veronica…