Por todos es conocida la tendencia actual de la industria del videojuego a acercarse cada vez más a ser eso, una mera industria, dejando de lado valores que la han hecho crecer de manera considerable durante su corta pero exitosa vida. Y es que si por algo se ha caracterizado el ocio electrónico es por innovar y romper moldes proporcionando experiencias y sensaciones que difícilmente podrían ser disfrutadas por otros medios. Es la interacción entre el jugador y la máquina lo que distancia al videojuego del resto de formas de expresión, permitiéndole ir un paso más allá.
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| Mario, ejemplo de explotación de un personaje (explotación de calidad, eso sí) |
¿Y qué tiene que ver todo esto, que además todos conocemos de sobra, con el título de esta entrada? Muy sencillo: de un tiempo a esta parte el mundillo del videojuego se ha ido dando cuenta de que no es necesario esforzarse demasiado para tener contentos a los usuarios y además facturar cantidades de dinero que anteriormente eran mucho más difíciles de obtener.
Actualmente, el videojuego se ha convertido en un elemento bastante común en el día a día de gran parte de la población. Esto supone un arma de doble filo para los usuarios tradicionales: la sociedad está mucho más concienciada e informada acerca de esta afición (cada vez se escucha menos eso de «¿Qué haces jugando a tu edad, si eso es para niños»?), pero la gran masa de usuarios se ha vuelto mucho menos exigente y más fácil de satisfacer.
Aunque esto se está haciendo cada vez más palpable, sobre todo en la generación de consolas actual, después de ver la lista de los candidatos a GOTY de este año 2011, el asunto se ha vuelto incluso más preocupante. Por si alguien no conoce cuáles son estos candidatos (por haber estado encerrado en un búnker, por ejemplo), algunos de los más nombrados han sido The Elder Scrolls V: Skyrim, Battlefield 3, Portal 2, The Legend of Zelda: Skyward Sword, Uncharted 3, Gears of War 3, Mario Kart 7, Batman: Arkham City, L.A. Noire y Xenoblade. Aunque me dejo algunos otros juegos importantes del año, esta lista me sirve perfectamente para ejemplificar el tema del que estábamos hablando. De los 10 juegos nombrados, 8 son secuelas directas o miembros de una saga con varias entregas anteriores.
Es incluso más sangrante el caso de las entregas anuales de las sagas Call of Duty o Assassin’s Creed. Con la casualización del público se ha llegado a un punto en el que muchas compañías desarrolladoras se limitan a introducir algunas mínimas mejoras en sus juegos año tras año para conseguir fidelizar al jugador y que éste pase por caja una y otra vez (véase el caso de FIFA o PES).
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| Igual es exagerado pero, ¿realmente valen lo que cuestan? |
Son esas cifras presentes al final de los títulos de los juegos las que están desvirtuando la industria, haciendo que cada vez se inviertan menos esfuerzos en mejorar la experiencia del usuario.
El panorama para 2012 tampoco es demasiado esperanzador en este sentido. Entre los juegos más esperados se encuentran Bioshock: Infinite, Max Payne 3, Mass Effect 3, GTA V, Ninja Gaiden 3, el reboot de Tomb Raider, RE: Operation Racoon City y Silent Hill Downpour.
De todos modos, aún existen rayos de luz entre tanto pesimismo, aunque cada vez son menos. Los juegos independientes siguen demostrando que con bajos presupuestos y una enorme creatividad pueden crearse productos excelentes. Por otro lado, juegos como Asura’s Wrath o The last of us aportarán nuevas IP’s al mercado durante este año. ¿Cuánto tardaremos en ver en las tiendas The last of us 2 o Asura’s Wrath Reloaded? Hagan sus apuestas.
Pues para 3DS tenemos por ejemplo Kid Icarus, que vale, es una segunda entrega, pero de un juego de NES de hace la tira de años, es prácticamente nueva, y luego Luigi's Mansion 2, que hombre, es una subsaga Mario, pero para nada tiene que ver con la saga principal.
A mí por ejemplo me molesta mucho, aparte de los CoD y los Mario, el Profesor Layton. No he visto juego tan cansino
Necesitamos juegos originales como Ghost Trick, etc! Hay sagas que es alarmante el descanso que necesitan, y acaban reventando como hicieron Guitar Hero, y otras explosiones de la generación.
Por suerte ultimamente es el mundo del videojuego indie el que tiene más facilidades para distribuirse y llegar a los jugadores, siempre nos quedarán estos juegos para sentir que al final la